Yo y la celiaquía: 2 - Mis casi tres meses de DSG. Celíacos En Acción.
¡Hola a todos!
Para empezar, quería decir que, el día 22 hice 3 meses de diagnóstico y de DSG.
Como sabréis en el post en el que expliqué todo el proceso que sufrí en mis carnes para que le dieran nombre a lo que me provocaba tantísimos síntomas que tenía, la celiaquía puede estar camuflada en muchos síntomas a los que los médicos muchas veces no nos dan explicación, y por tanto, podemos estar sufriendo de celiaquía durante muchos años y que no salga a la luz hasta que no demos con alguien que siga un protocolo completo para el diagnóstico.
Bueno... ¿y cómo te cambia la vida cuando te enteras que eres celíaco/sensible al gluten? Pues, la verdad, te cambia bastante: te vuelves más cauteloso a la hora de elegir lugares para ir a comer, desconfías incluso de tus familiares más cercanos porque piensas de que cualquier pequeño gesto equívoco que hagan en casa o dondequiera que vayas va a provocarte una contaminación cruzada, e incluso puedes a llegar a sentir que eres un maniático o neurótico...
Pero no os preocupéis, es normal al principio del diagnóstico te surjan ésta clase de situaciones como nuevo celíaco, es por eso que os quiero hablar de lo que cambia la vida para mejor cuando empiezas la dieta sin gluten luego de ser diagnosticado:
1º Sientes que poco a poco vas mejorando y olvidándote de esas molestias que tenías antes: Tus dolores de cabeza, idas y venidas continuas al cuarto de baño con diarreas/estreñimiento interminables poco a poco pasan a ser historia porque tu cuerpo comienza a regularizarse y a desintoxicarse del gluten. Es una liberación para mí el no tener que estar como antes estaba lo más cerca posible de un baño, y es una de las ventajas que tiene el empezar y llevar una dieta sin gluten de la mejor forma posible.
2º En el supermercado ya no vas y haces la comprita ligera como antes: De la noche a la mañana pasas a convertirte en un "Rastreator" de todos los productos sin gluten y en busca de los mejores precios. Tu pan de cada día es el buscar la bendita espiga de trigo tachada y, a ser posible, el sello de certificación de la FACE (o de la federación de asociaciones de celíacos de vuestro país). Comparas precios y precios, y pruebas un montonazo de productos hasta dar con los más buenos para el paladar -y para el bolsillo, aunque con lo que inflan los precios...-.
3º Tu bolso se convierte en un bolso de supervivencia gluten-free: Sí, tal como lo ois. Yo antes no tenía la necesidad de llevar productos para comer en la calle porque si me apetecía algo me iba a cualquier establecimiento y me lo compraba sin más. Pero, cuando te diagnostican de celiaquía, tienes que llevar "previsiones" para que, en caso de que tengas hambre y no haya nada apto en ningún establecimiento, puedas comerte algo. Las bolsitas de dos rebanadas individuales de pan de molde singlu, las tortitas de maíz y los paquetitos de galletas pequeños, se convierten en algo habitual en tu bolso.
4º Tienes que buscar sitios aptos que te aporten seguridad para no contaminarte: Cuando te diagnostican, ya no es como antes que podías ir despreocupado a cualquier lugar y pedirte lo que sea de comer. Ahora tienes que tomar nota de los sitios donde realmente certifiquen que no vas a acabar visitando al señor Roca inmediatamente después de comer. En situación desesperada en la que no conoces lugares sin gluten donde poder ir, te haces cliente fijo de McDonald's (al menos, en España).
5º Planificas el viaje con más antelación de lo acostumbrado: A cada sitio que vas, te acostumbras a preguntar en toooodos los hoteles de la zona si disponen de menú sin gluten. Te despides para siempre de los buffet libre del hotel y te limitas a comer lo que puedan ofrecerte. Os aseguro que lo pasaréis mal al principio, pero ya veréis que poco a poco lo cogéis como costumbre.
6º Flipas con los precios de los productos específicos sin gluten: Fliparéis, pero PARA MAL. No comprenderás la razón por la que el precio de tu barra de pan se TRIPLICA al de una barra de pan con gluten, porque la mayoría de las veces es pan chicle, o en su defecto, pan cartón que tendréis casi obligatoriamente que tostar o hacer en el horno para que sea comible. Las galletas son mucho más pequeñas y hasta engordan más en ocasiones por la de azúcares que tienen que ponerles para que se asemeje su sabor lo más posible al de las galletas que comías antes.
7º Las marcas Schär, Adpan, Proceli, Beiker... Se convierten en tus mejores aliadas: No es que le haga publicidad a ninguna de las marcas de productos sin gluten, lo que quiero deciros es que, de tanto buscar los productos que más se parezcan a los productos con gluten que comíais antes, acabáis conociéndoos todas las marcas sin gluten de los establecimientos. Hacéis una selección de los productos que más os gusten y se convierten en habituales de vuestra vida cotidiana.
En resumen: El haber empezado la dieta sin gluten está suponiendo una mejoría constante, porque ya casi no me acuerdo ni de los dolores tan fuertes de cabeza que antes tenía, ni de esas indigestiones, náuseas, vómitos y dermatitis de las que padecía constantemente. Ser celíaco en éste país es más duro de lo que pensáis, pero no por el hecho de tener ésta condición, sino por lo difíciles que se nos hacen las cosas con la carencia de ayudas para TODOS los celíacos y también por los ALTÍSIMOS precios de los productos sin gluten. Porque sí, por lo visto se creen que por ser celíacos automáticamente somos millonarios y podemos pagar cantidades ingentes de dinero por unos productos que traen mucho menos sabor, cantidad, que lo que solíamos comer antes. Porque hay muchísimas familias con más de un celíaco en casa que no tienen dinero suficiente para hacerse cargo de los gastos que supone una dieta sin gluten. Sin querer escandalizaros: la cesta anual con UN SÓLO MIEMBRO celíaco, se incrementa en 1000 € con respecto a una casa en la que no haya un celíaco, ésto quiere decir que si son cuatro los celíacos en casa, son 4000 € más que se van por la puerta, y todo porque nos encarecen la única medicina que tenemos para llevar controlada nuestra condición celíaca: los productos sin gluten.
Por ésto y mucho más, nació Celíacos En Acción (CEA), presidido por Lucía Gemma, una mujer celíaca que también tiene en su casa a tres hijos celíacos, y a un celíaco consorte que es su marido. Es una asociación GRATUITA para todos aquellos celíacos que buscan apoyo y ayuda al ser diagnosticados, y que lucha incansablemente por unos derechos esenciales para los celíacos, entre los que se incluye la bajada de precios de productos sin gluten y el conseguir unas ayudas para las personas celíacas o con familiares celíacos.
El vídeo de Lucía.
Ellos están #Cambiandolahistoria con su lema que es el hashtag #quenopare , ¡y vaya que sí lo están consiguiendo! Tú también puedes ayudar a que cambie la historia de dos formas muy fáciles:
1º Firmando la petición en Change para que el Gobierno nos facilite mediante ayudas y bajadas de precios la compra de productos Sin Gluten. (ya son 403.666 las personas que han firmado)
2º Asociándote a CEA en su página web: ES GRATIS.
Y recuerda... Si sois celíacos/sensibles al gluten, vuestra vida mejorará con la dieta sin gluten. No os la saltéis nunca ni os creáis que "por un poquito no os pasa nada", claro que pasa.
PD. ¡Ya tengo página en Facebook! Por allí podréis seguir todas las novedades y noticias sobre el blog y de cualquier cosa que acontezca.
Para empezar, quería decir que, el día 22 hice 3 meses de diagnóstico y de DSG.
Como sabréis en el post en el que expliqué todo el proceso que sufrí en mis carnes para que le dieran nombre a lo que me provocaba tantísimos síntomas que tenía, la celiaquía puede estar camuflada en muchos síntomas a los que los médicos muchas veces no nos dan explicación, y por tanto, podemos estar sufriendo de celiaquía durante muchos años y que no salga a la luz hasta que no demos con alguien que siga un protocolo completo para el diagnóstico.
Bueno... ¿y cómo te cambia la vida cuando te enteras que eres celíaco/sensible al gluten? Pues, la verdad, te cambia bastante: te vuelves más cauteloso a la hora de elegir lugares para ir a comer, desconfías incluso de tus familiares más cercanos porque piensas de que cualquier pequeño gesto equívoco que hagan en casa o dondequiera que vayas va a provocarte una contaminación cruzada, e incluso puedes a llegar a sentir que eres un maniático o neurótico...
Pero no os preocupéis, es normal al principio del diagnóstico te surjan ésta clase de situaciones como nuevo celíaco, es por eso que os quiero hablar de lo que cambia la vida para mejor cuando empiezas la dieta sin gluten luego de ser diagnosticado:
1º Sientes que poco a poco vas mejorando y olvidándote de esas molestias que tenías antes: Tus dolores de cabeza, idas y venidas continuas al cuarto de baño con diarreas/estreñimiento interminables poco a poco pasan a ser historia porque tu cuerpo comienza a regularizarse y a desintoxicarse del gluten. Es una liberación para mí el no tener que estar como antes estaba lo más cerca posible de un baño, y es una de las ventajas que tiene el empezar y llevar una dieta sin gluten de la mejor forma posible.
2º En el supermercado ya no vas y haces la comprita ligera como antes: De la noche a la mañana pasas a convertirte en un "Rastreator" de todos los productos sin gluten y en busca de los mejores precios. Tu pan de cada día es el buscar la bendita espiga de trigo tachada y, a ser posible, el sello de certificación de la FACE (o de la federación de asociaciones de celíacos de vuestro país). Comparas precios y precios, y pruebas un montonazo de productos hasta dar con los más buenos para el paladar -y para el bolsillo, aunque con lo que inflan los precios...-.
3º Tu bolso se convierte en un bolso de supervivencia gluten-free: Sí, tal como lo ois. Yo antes no tenía la necesidad de llevar productos para comer en la calle porque si me apetecía algo me iba a cualquier establecimiento y me lo compraba sin más. Pero, cuando te diagnostican de celiaquía, tienes que llevar "previsiones" para que, en caso de que tengas hambre y no haya nada apto en ningún establecimiento, puedas comerte algo. Las bolsitas de dos rebanadas individuales de pan de molde singlu, las tortitas de maíz y los paquetitos de galletas pequeños, se convierten en algo habitual en tu bolso.
4º Tienes que buscar sitios aptos que te aporten seguridad para no contaminarte: Cuando te diagnostican, ya no es como antes que podías ir despreocupado a cualquier lugar y pedirte lo que sea de comer. Ahora tienes que tomar nota de los sitios donde realmente certifiquen que no vas a acabar visitando al señor Roca inmediatamente después de comer. En situación desesperada en la que no conoces lugares sin gluten donde poder ir, te haces cliente fijo de McDonald's (al menos, en España).
5º Planificas el viaje con más antelación de lo acostumbrado: A cada sitio que vas, te acostumbras a preguntar en toooodos los hoteles de la zona si disponen de menú sin gluten. Te despides para siempre de los buffet libre del hotel y te limitas a comer lo que puedan ofrecerte. Os aseguro que lo pasaréis mal al principio, pero ya veréis que poco a poco lo cogéis como costumbre.
6º Flipas con los precios de los productos específicos sin gluten: Fliparéis, pero PARA MAL. No comprenderás la razón por la que el precio de tu barra de pan se TRIPLICA al de una barra de pan con gluten, porque la mayoría de las veces es pan chicle, o en su defecto, pan cartón que tendréis casi obligatoriamente que tostar o hacer en el horno para que sea comible. Las galletas son mucho más pequeñas y hasta engordan más en ocasiones por la de azúcares que tienen que ponerles para que se asemeje su sabor lo más posible al de las galletas que comías antes.
7º Las marcas Schär, Adpan, Proceli, Beiker... Se convierten en tus mejores aliadas: No es que le haga publicidad a ninguna de las marcas de productos sin gluten, lo que quiero deciros es que, de tanto buscar los productos que más se parezcan a los productos con gluten que comíais antes, acabáis conociéndoos todas las marcas sin gluten de los establecimientos. Hacéis una selección de los productos que más os gusten y se convierten en habituales de vuestra vida cotidiana.
En resumen: El haber empezado la dieta sin gluten está suponiendo una mejoría constante, porque ya casi no me acuerdo ni de los dolores tan fuertes de cabeza que antes tenía, ni de esas indigestiones, náuseas, vómitos y dermatitis de las que padecía constantemente. Ser celíaco en éste país es más duro de lo que pensáis, pero no por el hecho de tener ésta condición, sino por lo difíciles que se nos hacen las cosas con la carencia de ayudas para TODOS los celíacos y también por los ALTÍSIMOS precios de los productos sin gluten. Porque sí, por lo visto se creen que por ser celíacos automáticamente somos millonarios y podemos pagar cantidades ingentes de dinero por unos productos que traen mucho menos sabor, cantidad, que lo que solíamos comer antes. Porque hay muchísimas familias con más de un celíaco en casa que no tienen dinero suficiente para hacerse cargo de los gastos que supone una dieta sin gluten. Sin querer escandalizaros: la cesta anual con UN SÓLO MIEMBRO celíaco, se incrementa en 1000 € con respecto a una casa en la que no haya un celíaco, ésto quiere decir que si son cuatro los celíacos en casa, son 4000 € más que se van por la puerta, y todo porque nos encarecen la única medicina que tenemos para llevar controlada nuestra condición celíaca: los productos sin gluten.
Por ésto y mucho más, nació Celíacos En Acción (CEA), presidido por Lucía Gemma, una mujer celíaca que también tiene en su casa a tres hijos celíacos, y a un celíaco consorte que es su marido. Es una asociación GRATUITA para todos aquellos celíacos que buscan apoyo y ayuda al ser diagnosticados, y que lucha incansablemente por unos derechos esenciales para los celíacos, entre los que se incluye la bajada de precios de productos sin gluten y el conseguir unas ayudas para las personas celíacas o con familiares celíacos.
El vídeo de Lucía.
Ellos están #Cambiandolahistoria con su lema que es el hashtag #quenopare , ¡y vaya que sí lo están consiguiendo! Tú también puedes ayudar a que cambie la historia de dos formas muy fáciles:
1º Firmando la petición en Change para que el Gobierno nos facilite mediante ayudas y bajadas de precios la compra de productos Sin Gluten. (ya son 403.666 las personas que han firmado)
2º Asociándote a CEA en su página web: ES GRATIS.
PD. ¡Ya tengo página en Facebook! Por allí podréis seguir todas las novedades y noticias sobre el blog y de cualquier cosa que acontezca.
Comentarios
Publicar un comentario